El gran consumo y toda la cadena de valor de la alimentación piden al Gobierno que las altas laborales por Covid sean automáticas para evitar problemas de falta de personal en el sector y una cogestión en el sistema productivo. «El incremento de las bajas de trabajadores registradas en las empresas del sector supone un gran problema administrativo ante las dificultades que estos encuentran para obtener el alta médica, debido a la congestión que sufre la atención primaria», explican en un comunicado.
Según los datos que manejan, actualmente hay unas 20.000 trabajdores del comercio alimentario de baja por coronavirus. Una cifra que, alertan, aumenta a diario y que «complica la gestión de las empresas». Además, calculan que uno de cada siete de los trabajadores que está de baja en este momento podría reincorporarse de inmediato. Sin embargo, no lo están pudiendo hacer «porque no cuentan con la autorización médica».
Las distintas organizaciones que engloban la cadena de valor de la alimentación explican que otro de los problemas para gestionar las altas laborales es que se están encontrando que algunas regiones permiten la baja laboral telefónica después de realizarse un test de antígenos casero, mientras que el alta se tiene que conseguir de manera presencial en los centros de salud.
Ante toda esta situación, la hostelería, supermercados, grandes superficies y fabricantes de alimentación piden que se facilite «el alta laboral automática asociada a todas las bajas por Covid una vez superados los siete días que establece actualmente el periodo de cuarentena -u otros que las autoridades puedan indicar-, sin necesidad de acudir a los centros de atención primaria para obtener la misma, lógicamente, en ausencia de sintomatología».
Además, para evitar la saturación de la atención primaria, las copañías ponen a disposición del sistema público de salud sus mutuas de accidentes de trabajo para colaborar en esta tarea. Algo que, explican, ya hicieron con la vacunación.
Por último, las organizaciones también solicitan que se reduzcan los periodos de cuarentena a los mínimos indispensables para garantizar la correcta gestión de la pandemia en base a la información científica disponible y a la experiencia acumulada durante los últimos dos años de pandemia. En este sentido, piden que, desde un criterio sanitario, se estudie la posibilidad de acortar los plazos o limitar aquellos en que se aplican dichas cuarentenas -en coherencia con las decisiones que se anuncian en el ámbito escolar-, ya que consideran que «la actual reducción de diez a siete días está resultando insuficiente para garantizar la adecuada cobertura de las vacantes».
Source: ABC