La Opep mantiene el tijeretazo de dos millones de barriles de petróleo diarios hasta finales de 2023

Nuevo movimiento en el mercado petrolífero después de que el viernes la Unión Europea (UE) cerrara un acuerdo para fijar el techo del barril de petróleo ruso en los 60 dólares (unos 57 euros al cambio) y que queda lejos de los 85 dólares que cotizaba ese día el precio del barril de Brent, de referencia en Europa. Todo ello, solo tres días antes de que entre en vigor el embargo a la compra del crudo ruso que acordó el club comunitario en octubre y que se une al tope ya acordado en el seno del G7. En este contexto, la OPEP + ( los 13 miembros tradicionales de la organización más sus 10 aliados entre los que se encuentra Rusia) ha celebrado una reunión por videoconferencia este domingo para confirmar el mantenimiento de la producción actual ante la incertidumbre en los mercados tras la introducción del tope europeo al crudo ruso. Al respecto, la reacción de Rusia ha sido fulminante : el embajador de este país ante los organismos internacionales en Viena, Mikhaíl Ulyanov, aseguró que este año se dejará de suministrar petróleo a los europeos. Con la reunión de este domingo, el cártel liderado por Arabia Saudí, ha decidido mantener la hoja de ruta acordada el pasado mes de octubre y que apunta hacia una reducción de la producción en dos millones de barriles diarios hasta finales de 2023. La próxima reunión ha quedado fijada para el 4 de junio de 2023, aunque desde este grupo de países han abierto la puerta a reunirse «en cualquier momento» antes de esta fecha y adoptar «nuevas medidas inmediatas» si fueran necesarias . Un statu quo, ha asegurado el analista de UBS Giovanni Stauvono, que se justifica en «la incertidumbre sobre el impacto en la producción de crudo ruso» del nuevo paquete de sanciones comunitario, informa AFP. En el escueto comunicado oficial que ha seguido a la reunión de la Opep +, los 23 países han confirmado su disposición a mantener reuniones adicionales a la prevista para el 4 de junio de 2023 y justificado la continuidad de las medidas adoptadas en octubre en que estas «se justifican puramente por consideraciones de mercado» y persiguen «la estabilización de los mercados internacionales de petróleo». También han dejado abierta la puerta a la adopción de medidas adicionales dirigidas a apoyar estos mercados «y su estabilidad si fuese necesario». Noticia Relacionada estandar No CaixaBank augura que la factura energética de empresas y familias no empezará a bajar hasta 2024 Bruno Pérez Sostiene que los mercados de futuros no permiten vislumbrar una caída en los precios del gas y el petróleo durante el próximo año Mientras la indignación hace mella en Rusia ante el tope del club comunitario a su petróleo (ya ha dicho que cortará el grifo a Bruselas) a pesar de que la medida, que se aplicará desde este lunes, no afectará al carburante que llegue a Europa a través de oleoducto. Un guiño a Hungría. Lo que dicen los analistas Analistas como Joaquín Robles (XTB), han advertido esta semana que «el petróleo está en caída libre ante el tope en el precio del petróleo ruso y la perspectiva de una menor demanda» y constatado que no se esperaba ningún incremento de la producción en la reunión de hoy. En una línea similar, se han pronunciaron desde Bank of America (BOFA). «Una recesión podría arrastrar aún más la demanda y los precios a la baja del petróleo» , han sostenido en un informe publicado el pasado viernes, y señalado a dos factores: Uno de ellos es el acuerdo de recorte de la producción alcanzado en el seno de la Opep + en octubre y la voluntad de la Casa Blanca de compensar esta relativo cierre del grifo con sus reservas estratégicas hasta dejar el WTI en los 72 dólares el barril. «Con la disminución de la capacidad excedente y el retraso en la inversión, creemos que los 80 dólares por barril son los nuevos 60 dólares para el Brent» , apuntan desde esta entidad financiera. Sin embargo, el tope europeo al crudo ruso podría tener un efecto indeseado, según Bank of America: una subida de los precios «por una reapertura de China más rápida de lo previsto y un posible giro de Reserva Federal en el primer trimestre de 2013». En concreto, los analistas de BofA, han previsto que el crecimiento de la demanda será de 1,55 millones de barriles diarios «a medida que Asia, incluida China, se reabre tras la pandemia». Para el WTI (Nueva York) han calculado que alcanzará una media de entre 100 dólares y 94 dólares por barril en 2023, mientras que el Brent creen que se situará en los 110 dólares por barril en el segundo semestre del próximo año.
Source: abc economia

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