Mar Fábregas es, desde febrero de 2022, presidenta de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (AESEG), la patronal de la industria farmacéutica de medicamentos genéricos en España y principal representante de esta parte del sector ante las Administraciones Públicas y los colectivos profesionales (médicos, farmacéuticos, etc.), en tiempos en los que la industria del medicamento genérico acaba de demostrar la fortaleza de su servicio social durante la pandemia («todo un reto para todos, para los pacientes, para la industria, para el sistema«). Directora general de STADA España desde su nombramiento en 2013 (donde ha ocupado distintos puestos de responsabilidad como, por ejemplo, directora de Business Development y Global Strategic Supply Manager), inició su recorrido en la industria farmacéutica en otras prestigiosas firmas como en los casos de Chiesi y de Sandoz. Licenciada en Farmacia por la Universidad de Barcelona y Programa de Dirección General de IESE Business School, Fábregas aporta a la institución su amplia experiencia y conocimiento de los mercados nacional e internacional de medicamentos genéricos. Ciencia y empresa, unidas para representar unos intereses que nos interesan a todos. —Se cumplen 25 años de la llegada de los medicamentos de genéricos al mercado farmacéutico español. Empecemos por dos preguntas básicas: ¿Qué son los medicamentos genéricos? ¿Por qué ha sido importante su incorporación al Sistema Nacional de Salud? —Técnicamente, un medicamento genérico es aquel que presenta la misma composición cualitativa y cuantitativa que el principio activo del medicamento de referencia, con la misma forma farmacéutica, con las mismas garantías de calidad, eficacia y seguridad. Y a un precio muy reducido, ya que no han contado con los costes de investigación que ha podido tener un medicamento original en sus inicios. En el estuche incorporan las siglas EFG (Equivalente Farmacéutico Genérico). Suponen un considerable ahorro para el Sistema Nacional de Salud (1.000 millones de euros al año), que permite destinar partidas presupuestarias a la inversión en investigación. Son un pilar muy importante para la sostenibilidad del sistema. —¿Cómo ha sido la evolución de los medicamentos genéricos en España durante estos 25 años? —Podemos destacar tres etapas muy diferenciadas desde los propios comienzos. En 1997 se produjo una gran labor de formación e información (para médicos, farmacéuticos y pacientes). En una segunda, coincidieron las caducidades de varias patentes importantes, por lo que se favoreció el crecimiento, unido a medidas de fomento del genérico. Por último, desde 2015 hasta la actualidad, ha habido un estancamiento en crecimiento y en introducción de cuotas de mercado (41% frente al 65% de la media europea). Tenemos posibilidades de estrechar cada vez más ese espacio si contamos con la ayuda de las autoridades. «Operamos en un mercado regulado que no permite afectar al precio, por lo que se crea tensión en el mercado» —Además del ahorro que suponen para el Estado y para el bolsillo de la población, gracias a los medicamentos genéricos se consigue garantizar el acceso a medicamentos esenciales y que los pacientes puedan tener un tratamiento sin problemas de abastecimiento…. —Es una garantía de calidad en el servicio y de calidad en el abastecimiento. Si nos fijamos, por ejemplo, en el coste por paciente tratado con simvastatina, un hipolipemiante de amplio uso, vemos que con los recursos dedicados en 2002 al tratamiento de un solo paciente, hoy podemos tratar a más de 27. Y la pandemia ha dejado muy claro que los medicamentos genéricos son una red de seguridad para el sistema nacional de salud (en Francia hubo déficit en paracetamol durante esa época y en España no, gracias a la capacidad de nuestro sector industrial –y eso que la demanda se multiplicó por diez-). Se atendió a una demanda muy brusca, no planificada y se garantizó la continuidad del suministro, además del refuerzo de los stocks de seguridad. —Destacan desde AESEG que 7 de cada 10 fármacos genéricos que se consumen en España se producen en nuestro país. ¿Cómo contribuyen los laboratorios fabricantes de medicamentos genéricos a la creación de puestos de trabajo? ¿Qué datos pueden ofrecer en estos momentos? —Según datos recientes, damos empleo a 40.000 personas, entre puestos directos e indirectos. Un empleo de calidad, de paridad (51% empleo femenino, cerca de un 14% menores de 30 año, porcentajes que, además, se incrementan año a año). Con un claro foco en la sostenibilidad del sistema, aportamos una importante contribución a la economía española, con 20 plantas industriales y siete de cada diez genéricos producidos en España (a la cabeza en Europa). —Según datos de AESEG, la industria farmacéutica de medicamentos genéricos invierte el 27% de sus beneficios en innovación y desarrollo. ¿En qué áreas innova? —Un 27% de los beneficios retornan al i+D, a la mejora de los procesos, ya sea en formulación de excipientes (por ejemplo, para eliminar la lactosa en los casos que sean necesarios), la reducción de los tamaños en cajas y ‘blisters’, etc. Aplicamos algoritmos y análisis del dato al canal de suministro, en las automatizaciones de demanda y procesos de compra, además de nuevas herramientas digitales de trabajo. Toda una serie de acciones esenciales en un sector con mucha capilaridad (hay 22.000 farmacias en España).
Source: abc economia
2022-10-09