El misterio de la desaparición de la miel «made in China» de los super

Es un misterio a la altura de las dotes deductivas de Sherlock Holmes y Hércules Poirot. Pongámonos en situación: China ha sido durante los últimos años uno de los primeros importadores de miel a España. Solo el año pasado se importaron del gigante asiático 4.770 toneladas, el 15% del total ejerciendo como nuestro segundo proveedor. Una cuota que ha seguido manteniendo en 2021. En paralelo, Portugal fue nuestro principal suministrador en 2020 con 6.698 toneladas, el 21% de todo lo importado. Posición que ha conservado en los ocho primeros meses del año. Sin embargo, según un investigación realizada por la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) y la organización agraria COAG, en el lineal de los supermercados españoles la miel «made in China» ha desaparecido. En concreto, en mucho envases se habla de mieles de Ucrania, Cuba, Uruguay y Rumanía. Tampoco aparece Portugal por ningún sitio. Ambas organizaciones piden que se modiquen la legislación europea y exigen una investigación al Gobierno para averiguar el paralelo de toda esa miel china ¿Qué está ocurriendo?

Según el estudio realizado, las importaciones chinas siguen entrando en nuestro país pero estas pasan antes por otros países de la Unión Europea donde la miel es transformada y mezclada, para adquirir el ‘Origen España’ (se triangula) por medio de países como Portugal y, últimamente, Rumanía. Como denuncia el responsable del sector apícola de COAG, Pedro Loscertales, «una miel cosechada en China e importada por un operador portugués, y posteriormente mezclada con miel cosechada en España, puede adquirir origen España si más del 50% en peso de la mezcla final es española». Algo que han apuntado los autores del informe, permite la legislación europea. <blockquote class=»twitter-tweet»><p lang=»es» dir=»ltr»><a href=»https://twitter.com/hashtag/Alimentaci%C3%B3n?src=hash&amp;ref_src=twsrc%5Etfw»>#Alimentación</a> Denunciamos junto a <a href=»https://twitter.com/La_COAG?ref_src=twsrc%5Etfw»>@La_COAG</a> amparo legal a un posible engaño masivo al consumidor en el origen de la miel ➡️ <a href=»https://t.co/GDRVEtN3BV»>https://t.co/GDRVEtN3BV</a> <a href=»https://t.co/88rSvzgZmp»>pic.twitter.com/88rSvzgZmp</a></p>&mdash; OCU (@consumidores) <a href=»https://twitter.com/consumidores/status/1460617421312565258?ref_src=twsrc%5Etfw»>November 16, 2021</a></blockquote> <script async src=»https://platform.twitter.com/widgets.js» charset=»utf-8″></script>

En concreto, el
Código Aduanero de la Unión
, al hablar de la ‘adquisición de origen’ apunta en su artículo 60 que «las mercancías en cuya producción interviene más de un país o territorio tienen su origen en el país en que se haya producido su última transformación sustancial y económicamente justificado». En esta última noción se incluyen operaciones como la mezcla o el tratamiento térmico (muy comunes en los importadores de miel a granel, previo a su envasado).

En este sentido, Loscertales ha añadido que «dicha mezcla podría volver a mezclarse con nuevas partidas de mieles originarias de China confiriendo, de nuevo, el origen España las subsiguientes mezclas finales». Es decir, los operadores podrían seguir atribuyendo el ‘Origen España’ a sucesivas mezclas de mieles que reintrodujeran en nuestro país siempre que la materia prima española sea superior al 50%.

Miel ‘tuneada’
¿Entonces? ¡Elemental, querido Watson! OCU y COAG han concluido que los importadores españoles de miel china estarían mezclándola en otros estados de la Unión Europea con miel española, en las proporciones que marca la normativa para que les permitan la adquisición de la ‘nacionalidad’ española. Esta sería la única razón por la que el ‘made in China’ ha desaparecido del etiquetado de las mieles más vendidas en los lineales.

Pero, ¿esto es legal? Loscertales (COAG) ha especificado que «no creemos que estén cometiendo ninguna ilegalidad y creemos que tanto la aplicación de la normativa comunitaria y estatal analizada lo facilitan» y exigen al Gobierno la modificación de esta regulación para evitar lo que ven como un engaño masivo y piden una investigación para conocer dónde está todo la miel de origen chino. Desde la OCU se ha mostrado muy críticos con este modus vivendi: su directora de Comunicación y Relaciones Institucionales Ilena Izverniceanu ha concluido que «los consumidores merecen poder confiar que lo que se dice en las etiquetas es la realidad sobre el origen de los productos, más allá de trucos o arficios legales para cambiarles la nacionalidad». ¡Caso resuelto!
Source: ABC

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *