La fusión -absorción, más bien- entre Caixabank y Bankia sigue sus pasos. A finales del primer trimestre de 2021 culminó la integración legal; luego llegó el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y adopción de logos; y estos últimos meses los esfuerzos se centran en acometer una integración tecnológica lo más limpia posible, sin sobresaltos. Pero los planes, más en una envergadura como esta, no siempre salen como se espera y el gigante nacional que se ha alumbrado también afronta ciertos problemas en su operativa actual.
Las oficinas de Caixabank siguen trabajando al mismo ritmo de siempre. En cambio, las de Bankia son las que afrontan el mayor reto dados los acontecimientos que se están produciendo. Varias fuentes internas de… Ver Más
Source: ABC