En el proceso de cambio del modelo económico hacia el que avanzamos, las finanzas sostenibles han ido adquiriendo un gran protagonismo. Los criterios sociales, ambientales y de buen gobierno (ESG) están presentes en las estrategias de las empresas y además sus clientes les exigen que sean cada vez más sostenibles. El Foro ABC Economía Sostenible ha reunido hoy a especialistas de los mercados para analizar todas las claves de esta tendencia absolutamente asentada entre los inversores. Patrocinado por la gestora Bestinver (perteneciente al grupo Acciona), el encuentro se desarrolló bajo el título ‘La importancia de invertir de una manera sostenible». Moderado por María Jesús Pérez, redactora jefe de Economía de ABC, ha contado con la presencia de Francisco Javier Garayoa Arruti, director general de Spainsif, Marisa Aguilar, directora general de Allianz Global Investors en España y Portugal, Joan Fontrodona, director del Departamento de Ética Empresarial del IESE y Jorge Fuentes, gestor de Renta Variable Internacional de Bestinver.
Una de las primeras preguntas que se plantea el inversor es si rentabilidad y sostenibilidad son conceptos compatibles. «Debemos presentar los conceptos de inversión y sostenibilidad sin que sean antagónicos a inversión rentable. No debería haber inversión sostenible si no es rentable. Es fundamental que todas las estrategias lo hagan con una premisa: generar valor para sus accionistas. Esa es la clave», indica Jorge Fuentes. Marisa Aguilar recuerda que existen grandes opciones de inversión sostenible. «Podemos invertir en empresas que están cambiando con buenas prácticas o podemos hacerlo en productos y servicios destinados a solucionar problemas como el cambio climático». Pero, precisamente por existir muchas formas de trabajar la inversión sostenible, «la balanza de lo económico, social y medioambiental es muy inestable», matiza Joan Frontodona.
La inversión sostenible se debe entender dentro de un cambio de modelo económico. «Supone un montón de oportunidades para el mercado. No hay magia, detrás siguen existiendo las mismas variables del mercado, pero ahora confluyen el soporte al cambio y la rentabilidad», afirma Francisco Javier Garayoa. La directora general de Allianz Global Investors en España y Portugal considera necesario entender el papel de la inversión sostenible. «El sector financiero es un actor fundamental porque permite canalizar ahorro privado hacia la consecución de los objetivos que nos están marcando nuestras autoridades a nivel internacional», indica. No se trata solo de transformar el sector energético sino también de transformar nuestro modelo energético, «que sea más sostenible». Es importante que el inversor vea su utilidad, «su papel es aportar flujos porque con el dinero público existente no es suficiente», añade Aguilar.
Cambio de mentalidad
El director del Departamento de Ética Empresarial del IESE, por su parte, cree que la sociedad está pidiendo un cambio de mentalidad, «volver a lo que eran los mercados financieros en sus orígenes. Estamos manteniendo el mismo modelo que hasta ahora pero más sofisticado. Para mí la pregunta que se hace el inversor es ¿cuánto está dispuesto a perder para ser socialmente responsable?». Ante esta pregunta el director general de Spainsif tiene claro que es importante tener en cuenta que «si quieres tener una alta rentabilidad durante 10-15 años, no te queda más remedio que invertir con criterios ambientales, sociales y de gobernanza». Por su parte, el gestor de Renta Variable Internacional de Bestinver señala también la importancia de canalizar compañías que llevan a cabo acciones para ser mejores. «Hay empresas que se ven como ganadoras en esta transformación y tiene una rentabilidad normal. Peor otras que son percibidas como perdedoras tienen una rentabilidad maravillosa», matiza. Y recuerda que no se debe dar a elegir entre rentabilidad y sostenibilidad, sino que «la sostenibilidad es la forma adecuada para alcanzar rentabilidad sostenible». Marisa Aguilar señala también el cambio de mentalidad de las nuevas generaciones, «jóvenes que quieren invertir cómo piensan», por lo que la rentabilidad financiera no será lo único importante. «Es importante que esta tendencia se haga con sentido común y que vaya a buen puerto. Tiene que ser posible congeniar las sinergias entre el éxito corporativo y el beneficio de la sociedad civil», afirma Jorge Fuentes. «Si solo invertimos por modas, sin análisis, con factores que no son homogéneos se puede crear una burbuja o que las inversiones no salgan bien a largo plazo», añade.
Dentro de la inversión sostenible hay un mayor predominio por los temas ambientales. «Es lo que está más regulado, pero hay que pensar en la parte social y en el buen gobierno», subraya Joan Frontrodona. «La parte medioambiental es más fácil de medir mientras que la parte social es más compleja y entra en la parte cultural de muchos países», cuenta Francisco Javier Garayoa, a la vez que recuerda que las finanzas sostenibles «no hay que mezclarlas con la filantropía, fondos públicos….pueden hacer una labor pero son cosas distintas».
Source: ABC