Con retraso y menos efecto del inicialmente previsto, el Gobierno dio luz verde ayer a un nuevo subsidio de 430 euros que cubrirá durante tres meses a los parados que agotaron todas las prestaciones de desempleo durante los meses de confinamiento. La ayuda llegará a unas 250.000 personas, la mitad de las que inicialmente se pusieron en el foco del diálogo social precisamente por el retraso sufrido en su puesta en marcha.
Las críticas de los sindicatos fueron ayer rotundas: «Llega tarde y mal», aseguraron CC.OO. y UGT en un comunicado. Las razones de la demora de esta ayuda, que comenzó a negociarse en verano y se pensaba estaría lista nada más arrancar el curso, se encuentran en las discrepancias en el seno del Ejecutivo. Fuentes cercanas al Gobierno aseguran que ha sido el empeño de la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, lo que ha impulsado finalmente la medida, pese a que no se veía con tan buenos ojos en el bando económico socialista, con ministros como Nadia Calviño o José Luis Escrivá haciendo de contrapeso.
La marejada lleva tiempo gestándose. Los sindicatos recuerdan que se trataba de una reivindicación del mes de junio y que el objetivo era dar cobertura a las 550.000 personas que habían agotado sus prestaciones -o iban a hacerlo- desde el primer estado de alarma, que fue desde mediados de marzo hasta final de septiembre. La prestación cubrirá ahora a quienes entre el 14 de marzo y 30 de junio agotaron el desempleo sin tener acceso a otras ayudas ni tampoco poder buscar trabajo por las restricciones el confinamiento y el parón de la actividad económica. Y la cuantía será el 80 % del IPREM, lo que arroja los 430 euros. Además, se ha de estar en situación de desempleo e inscrito en los sistemas públicos como demandantes, aunque también podrán acceder al subsidio las personas que estén cumpliendo el mes de espera para acceder al subsidio de agotamiento de la prestación contributiva. Eso sí, no será compatible con el cobro de la renta mínima, la renta de inclusión, salario social o ayudas análogas de cualquier administración pública».
Además, también se aprobó un subsidio de tres meses para el personal en eventos o obras culturales, del que se beneficiarán más de 10.000 trabajadores y costará 14 millones. Así como para los profesionales del mundo taurino que figurasen activos en el censo, que podrán acceder extraordinariamente a la prestación. Igualmente se prorrogó hasta el 31 de enero la ayuda extraordinaria para artistas en espectáculos públicos.
Source: ABC