Nagelsmann un ‘Toro’ suelto en la Bundesliga

Samuel Aldrey 

Darle la confianza a un joven entrenador sin ningún tipo de experiencia suena como una locura. Pero eso fue exactamente lo que hizo el TSG 1899 Hoffenheim en febrero del año 2016 con Julian Nalgelsmann,  convirtiéndolo en el técnico más joven en dirigir un partido de la Bundesliga. Cuatro años después es tercero en el campeonato 2019/2020 con el RB Leipzig y en octavos de final de la Champions League, pero qué lo hace tan especial, sin duda su ingenio.

Porque con la excepción de Marco Rose, técnico de Borussia Mönchengladbach, hay pocos entrenadores en el campeonato que iniciaron el 2020 con tanta expectación como el joven alemán.

Análisis estadístico.

Más allá de ir tercero en la Bundesliga para poder entender el estilo de Nagelsmann hay observar algunos números que ayuden a entender la idea que proyecta en el campo.

Al momento de escribir estas líneas el Leipzig se encuentra tercero en la Bundesliga detrás del Borussia Dortmund y el Bayern Múnich. Suma 50 puntos, 14 victorias, 8 empates y 3 derrotas con 62 goles a favor y 26 en contra (+36).

 El Dortmund solo tiene un punto de diferencia 51, pero con 15 victorias, 6 empates y 4 derrotas. Además suma 68 goles a favor y 33 en contra (+35 de diferencia)

Mientras el Bayern marcha líder con 55 puntos, 17 victorias, 4 empates y 4 derrotas con un registro goleador escalofriante 73 goles a favor y 36 en contra (+47 de diferencia).

Con estas cifras, sin duda, Nagelsmann es el técnico a observar sobre todo por su plantilla que a diferencia del conjunto bávaro las estrellas consolidadas brillan por su ausencia. Entonces, ¿cuál es el éxito de Nagelsmann en Leipzig? Sus tácticas. Pero para entender mejor su estilo de juego también hay que entender la metodología del equipo. 

Desde que el imperio de bebidas de Red Bull se hizo con el Salzburgo y el Leipzig en ambos conjuntos ha habido un estilo claro: un ritmo alto en posesión y ataques verticales rápidos.

Atacan verticalmente con pases veloces hacia adelante para romper las líneas de presión y al perder la posesión  se zumban agresivamente a presionar al rival. Sin embargo, con Nagelsmann el Leipzig esta temporada ha demostrado más flexibilidad táctica con el entrenador cambiando de tres marcadores centrales a una línea de cuatro dependiendo del rival al que se enfrente, pero las ideas tácticas siguen siendo las mismas.

La clave en la fase de ataque viene al intentar jugar rápidamente la pelota hacia adelante para crear ocasiones de gol. En lo que va de temporada los ‘Toros’ promedian 14.57 disparos por cada 90 minutos de juego y 2.63 goles por partido, según los datos estadísticos de la Bundesliga. Además, realizan 84.5 pases progresivos (habilitaciones hacia compañeros en líneas avanzadas) por cada 90 minutos de juego. 

Todo esto muestra el ADN del equipo de Nagelsmann se ha adaptado al estilo de juego frenético del RB Leipzig. En el Hoffenheim, también se veía un estilo vertical similar, pero ahora con mejores jugadores a su disposición se está viendo la evolución de su modelo de juego. 

Además, hay que observar que el alemán no es un técnico que favorezca la posesión como Guardiola o Setién. Esto es evidente por su forma vertical de jugar y en lo que va de temporada el Leizig promedia 51.4% de posesión por partido, va séptimo en esta categoría en las estadísticas. Conceden 9.31 disparos por juego, el tercer promedio más bajo del campeonato, y estos disparos tienden a concederse en áreas menos óptimas para los rivales normalmente desde fuera del área.

Así que acá están los conceptos de juego en acción que permiten a esos números existir.

 

Fase de construcción y rotaciones.

Obviamente habrá diferencias de cómo el Leipzig construye el juego desde atrás en la fase de ataque porque hay que tener en cuenta cuando juega con tres centrales o con línea de cuatro. Estas diferencias son inevitables dado que las posiciones ocupadas en el campo en ambos sistemas son distintas. Pero, las ideas que recubren estos sistemas sí se mantienen inalterables.

El principio fundamental de todos los conceptos es la idea de rotación. Los laterales, o carrileros, tienden a moverse relativamente alto en los primeros momentos de la fase de creación. 

Este simple mecanismo táctico está diseñado para proveer anchura, pero también para forzar a la oposición a defender de forma más abierta para contrarrestar esta amenaza. Esto le da a cambio espacios en la zona central del campo al Leipzig que, entonces,  puede explotar para poder progresar con el balón controlado. 

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Aquí se observa una situación en la que el Leipzig juega desde atrás. El lateral se mueve a ocupar una posición más alta en el campo, que causa la creación de un espacio interior para que el mediocampista central pueda progresar de forma segura el esférico. Desde este punto, se verá otro pase vertical para conectar con el lateral o se usará un pase para cualquier compañero en un área avanzada.

Estas rotaciones descubren el concepto principal del juego de Nagelsmann. Verticalidad en posesión. Esto simplemente significa que la posesión no irá dando tumbos de un lado a otro sin sentido por la línea defensiva. En cambio, se realiza con la intención de que cada jugador cada vez que reciba la pelota pueda tener un pase que permita jugar hacia adelante.

Aunque habrá momentos en lo que esto no será posible y no existirá un pase vertical claro hacia un compañero. En esta situación la pelota será jugada a otro compañero que buscará conectar el pase vertical.

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En este ejemplo se observa la combinación de rotación y verticalidad juntas. Mientras el balón se mueve hacia fuera del área el Leipzig intenta moverlo en ángulos a través de la presión del contrario y el mediocampista central en una posición más profunda. Al avanzar el balón  vemos la rotación desde el centro hacia afuera en un posición más ancha.

 Está rotación tiene como último receptor al mediocampista que sale de la sombra de la marca de la oposición para recibir la pelota al espacio.

La importancia del doble pivote.

Ya sea con tres centrales o línea de cuatro atrás hay un aspecto inamovible en este sistema táctico y eso es el uso del doble pivote en la base del mediocampo.

Esto es quizás lo más importante, pues, estos dos jugadores dan seguridad cuando el Leipzig está en fase de ataque, pero además asisten a la línea defensiva cuando el oponente está en ataque.

En cualquier equipo exitoso debe existir un balance entre el ataque y la defensa. Pocos equipos simplemente atacaran con todos sus jugadores sin asegurarse un respaldo en caso de un contraataque. El Manchester City a pesar de que ataque con todos sus jugadores usa, al menos, un jugador en el puesto ‘6’ para brindar seguridad en caso de una contra.

Julian Nagelsmann se ha adaptado a usar dos jugadores como pivotes. Esto es una de las diferencias con respecto a su paso en Hoffenheim en el que usaba solo uno. Al usar dos jugadores en con ese rol se puede observar una gran versatilidad que permite a uno rotar en posiciones más avanzadas durante la posesión y al otro retener una posición más retrasada para cubrir.

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En posesión se raro ver a estos dos jugadores en la misma línea. En cambio estarán cerca del jugador con la posesión y el otro más abierto. Esto permite que la pelota entre en la zona de doble pivotes y luego ser jugada en vertical al segundo pivote. La importancia siempre está en la verticalidad del tercer jugador en recibir la pelota. 

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Aquí podemos observar una transición rápida. Cuando se presentan grandes espacios se verá al doble pivote con un jugador tomando una posición adelantada para hacer dos cosas: la primera recibir la pelota y crear otro pase vertical o para mover a la línea del rival fuera de posición. Aquí es donde el concepto de rotación es clave. 

Porque mientras el jugador que recibe la pelota avanza y toma una posición avanzada rompe el espacio entre en los dos jugadores defensivos. Esto saca al jugador rival (resaltado en la imagen) de ese espacio junto a él y permite al segundo pivote hacerse dueño en solitario del espacio central del campo para aceptar la posesión de la pelota y enviar pases verticales.

Los pases verticales en ataque. 

 

Se ha hablado mucho en el análisis sobre los pases en vertical, pero es que ese es el concepto fundamental  si se quiere estudiar a Nagelsmann y al RB Leipzig. Su importancia es crítica para ver lo talentoso que es Julian como entrenador.

Ya discutimos que cada jugador del Leipzig es entrenado para dar pases verticales en el segundo toque después de recibir el balón. Aunque esto no siempre es posible y de vez en cuando habrá pases horizontales para mover a la línea defensiva para generar los espacios necesarios crear canales de pase que permitan jugar en vertical.

Esto se da principalmente, porque los jugadores de ataque toman posiciones entre las líneas y permiten pases verticales en zonas peligrosas.

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Así veremos en el último tercio de la cancha una sobrecarga de jugadores antes de jugar pases verticales veloces. Esta es la razón por la cual generan 14.97 disparos por partidos, han perfeccionado el arte de jugar pases verticales entre las líneas de los contrarios. A penas el primer pase vertical llega al segundo delantero, este mueve rápidamente la pelota hacia el área para crear una ocasión de gol. 

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Aquí podemos ver que tan peligroso es la verticalidad que con tan solo tres pases en combinación generan una ocasión manifiesta de gol. Empieza con el pivote. El balón se mueve en vertical hasta la última línea defensiva con el delantero que la devuelve a su compañero de ataque que inmediatamente la envía a su compañero en el área penalti para generar una ocasión de gol.

Así es como Julian Nagelsmann ha perfeccionado su estilo vertical en posesión desde su debut en 2016 con el Hoffenheim y que ahora está perfeccionado en el RB Leipzig que marcha tercero en la Bundesliga. Un técnico para considerar en el futuro.

 

Source: Meridiano

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