Riesgos en Iberoamérica

Al encontrarse España en la UE, por supuesto que le afectan muchísimo las malas expectativas económicas en este ámbito, encabezado por Alemania, a lo que añadiría el obscuro problema francés y el caos de Italia y las consecuencias de la política del Reino Unido, así como la peligrosa realidad que vive Rusia. Pero esa semisuma europea, a efectos empresariales españoles, se ve agobiada a causa de la creciente crisis iberoamericana, con el trasfondo político que se adivina en las noticias que llegan de Argentina, Chile, Bolivia, Colombia, no digamos de Venezuela, también de México y, por supuesto, de Centroamérica.

Las inversiones españolas en Iberoamérica poseen un complemento importante para nuestra expansión. Dos grandes pilares las impulsaron; por un lado, el muy semejante contexto social, encabezado por el idioma común, y toda una serie de enlaces intelectuales que se ha hecho visible, por ejemplo, en las reuniones de las Academias más importantes del mundo hispano. Por lo que se refiere a la economía, no es posible olvidar ese examen magnífico de los problemas económicos venezolanos expuesto recientemente en Madrid por la Secretaria de la Academia Nacional de Ciencias Económicas de Venezuela, Sary Levy, o cuando ahora mismo llegan las noticias de la polémica derivada de las elecciones presidenciales de Bolivia. Tampoco es posible dejar a un lado la excelente altura técnica que tiene el volumen titulado «Investigaciones para el desarrollo económico en Bolivia», preparado conjuntamente por las Academias Boliviana de Ciencias Económicas, la Fundación INESAD el Fondo de Desarrollo para el conjunto iberoamericano CAF.

Todo eso, ¿se ha ocultado en los planteamientos de Evo Morales? ¿Y no han tenido más que esas técnicas perfectas, los restos de mensajes que van de Manoilescu a Prebisch, cristalizados en el «estructuralismo económico latinoamericano»; pero que están detrás de un mundo sindical poderoso en Argentina, en la actual herencia del peronismo? Y todo eso ¿puede incitar a que Europa, y con ello España, no se enlace con el conjunto económico de Iberoamérica?. ¿Vamos a presenciar la tercera retirada -la primera fue la independencia de los virreinatos, y la segunda, la de 1898- de capitales y empresas españolas huyendo de la región iberoamericana?
Source: ABC

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *