Draghi se ha despedido con satisfacción y serenidad del consejo del BCE, que ha presidido los últimos ocho años. En su última reunión no ha reaccionado a las críticas públicas que se han escuchado a su gestión en las últimas semanas. «Alguno de los disidentes ha llamado a la unidad», ha desvelado, en la misma rueda de prensa en la que ha justificado sus decisiones del pasado septiembre, particularmente teniendo en cuenta los datos que va arrojando la economía alemana, como el de producción manufacturera.
Pero aun así ha reconocido que la actual política del BCE responde a una estrategia de contingencia y ha admitido que «los tipos negativos pueden tener efectos secundarios», recordando que por ello decidieron en septiembre introducir un sistema de dos tramos y eximir a una parte del exceso de las reservas mínimas del pago de la tasa de interés a los depósitos. El Consejo de Gobierno del BCE, en esta última reunión, ha reiterado la necesidad de que la política monetaria sea muy expansiva durante un periodo de tiempo prolongado para apoyar que la inflación suba a medio plazo.
PUEBLA
Draghi: «si quieren saber qué haré en el futuro, pregúntenle a mi mujer»
Draghi no ha querido dar detalles sobre su futuro profesional. «Deben preguntarle a mi mujer», ha dicho, y se va sin tocar los estímulos que ya se aprobaron en septiembre para atajar una posible crisis en Europa: la referencia de tipos general sigue en el 0%, el que se cobra a la banca por sus depósitos en el -0,5% y un programa de compra de deuda de 20.000 millones de euros mensuales a partir de noviembre.
De esta manera, completará su mandato sin haber subido los tipos ni una sola vez desde que accediera al puesto allá por 2011.El relevo que pondrá al frente de la entidad a Christine Lagarde no aportará cambios de calado en la política monetaria a corto plazo, ya que se da por hecho que la francesa seguirá una línea continuista. «No tengo nada que decirle porque ella sabe muy bien lo que tiene que hacer», han sido las únicas palabras de Draghi a su sucesora, además de expresarle sus mejores deseos.
Draghi ha dicho también que los últimos datos económicos disponibles «indican un debilitamiento económico más prolongado de la economía de la zona del euro». Tras la última reunión, afirmó que persisten «importantes riesgos a la baja» para el crecimiento y que las presiones inflacionistas son débiles, de manera que su discurso parece haber avanzado en graduación hacia el pesimismo. Ha mencionado últimos datos de gerentes de compras, industria y proveedores de servicios juntos, que sugieren que la economía actualmente tiene poco impulso en la Eurozona, especialmente debido a la desaceleración en la industria dependiente de la exportación en Alemania, la economía más grande de la zona del euro.
Draghi ve el persistente retraso del Brexit con sentimientos encontrados porque el causa incertidumbre en la economía. «Por el momento no está completamente claro qué sucederá en el Reino Unido», ha dicho, dejando abierto ese elemento de incertidumbre en una etapa de la que se siente «orgulloso de cómo siempre perseguimos el mandato del BCE». «De hecho», ha insistido, «no rendirnos nunca forma parte de nuestro mandato».
Source: ABC