La banca acelera la venta del exceso de ladrillo heredado de la crisis
La pesada digestión inmobiliaria llega, por fin, a su última fase. Los bancos españoles dieron el año pasado un acelerón a la limpieza de sus balances para tratar de desprenderse de una vez por todas de la nefasta herencia del ladrillo. Así, el conjunto del sector enajenó solo en 2017 más de 50.000 millones en créditos morosos y fallidos e inmuebles y suelo adjudicados, casi el doble que los 27.431 millones vendidos entre 2012 y 2016, según cifras recopilados por Analistas Financieros Internacionales (Afi). Y este año se prevé igualmente activo en esa tarea, pues el sistema aún soporta activos inmobiliarios improductivos por unos 127.000Seguir la noticia