El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, promulgó hoy una norma que limita los pagos en efectivo a 3.000 euros en cualquier tipo de transacción.
Según explicó la Presidencia en un comunicado, una vez que se supere esa cantidad, o su equivalente en otra divisa, será obligatorio utilizar un «medio de pago específico».
Junto a esta medida, el presidente también promulgó una ley que permitirá a los servicios de información y seguridad acceder a los datos de telecomunicaciones e internet, siempre después de obtener autorización judicial.
Rebelo de Sousa explicó que promulga esta medida «teniendo presente la relevancia de la cuestión para la defensa del Estado de derecho democrático, en particular para la protección de los derechos fundamentales» y el «consenso jurídico alcanzado» en este ámbito.
Source: ABC