Bosques «transparentes» para dar oxígeno a la descarbonización
La idea de Reforestum surgió mientras el joven emprendedor Diego Sanz charlaba con una amiga que confesaba sentirse culpable por el impacto ambiental que suponía coger cada día el coche para desplazarse hasta el pueblo donde trabajaba. Licenciado en Informática, a Sanz se le encendió una bombilla para iluminar la conciencia medioambiental de su amiga: calcular exactamente cuánto CO2 emitía su vehículo y plantar árboles que compensaran esa huella de carbono. El planteamiento fue madurando y hace tres años Sanz lanzó una campaña de «crowdfunding» en la plataforma Kickstarter. Con los 40.000 euros recaudados, compró un terreno de cinco hectáreas cerca del Parque Natural deSeguir la noticia