El número de fallecidos por sarampión este año que está a punto de acabar será menor a 100.000 personas por segunda vez en la historia de la humanidad. Ya ocurrió también el año pasado. Nunca antes se había producido un registro de víctimas mortales por debajo de esa cifra. Los datos aún no son oficiales pero demuestran que el sarampión, que sólo hace unas décadas mataba a millones de personas en todo el mundo, está en franco receso. Y solo hay una explicación para ello: el uso masivo de su vacuna. De hecho, ésta es la enfermedad evitable que aún causa más muertes. Entre lasSeguir la noticia