Para nadie es un secreto el grave estado ecológico por el que está pasando la Tierra. Sabemos que los animales ya están sufriendo una extinción masiva que se representa en una pérdida de millones de años de historia evolutiva. Sin embargo, gran parte del tiempo parecemos obviar que otros seres vivos también sufren de este mismo destino. Se trata de las plantas, cuyas especies ya están siendo diezmadas por culpa del ser humano.
Así lo comprobaron científicos del Real Jardín Botánico de Kew y la Universidad de Estocolmo. Su investigación, publicada en Nature, revela que al igual que los animales, las plantas también están sufriendo una extinción masiva.
Los datos no son muy esperanzadores. Según señalan, en los últimos 250 años 571 especies de plantas han desaparecido del planeta. Increíblemente esto resulta más del doble de los mamíferos, aves y anfibios extintos en el mismo periodo de tiempo. Si bien los animales están desapareciendo a una velocidad 1.000 veces mayor de lo que ocurriría naturalmente, las especies vegetales no se quedan atrás. Estos seres vivos silenciosos se están extinguiendo 500 veces más rápido.
El estudio se realizó con el fin de alertar de que no solo los animales están en peligro. También las plantas están sufriendo los cambios, por lo que se debe tratar de proteger la biodiversidad. Eimear Nic Lughadha, uno de los autores del estudio, resaltó la importancia de saber esta información:
Las plantas sustentan toda la vida en la tierra, proporcionan el oxígeno que respiramos y los alimentos que comemos, además de constituir la columna vertebral de los ecosistemas del mundo, por lo que la extinción de las plantas es una mala noticia para todas las especies. Esta comprensión de la extinción de plantas nos ayudará a predecir futuras extinciones de estos seres, así como otros organismos”.
También fueron resaltadas las zonas que enfrentan más peligro para sus especies vegetales. Estas se concentran en los trópicos y el Mediterráneo, así como en islas. Dichos lugares suelen ser muy biodiversos pero también vulnerables a la acción humana.
Y no volvieron a verlas…
Por otro lado, se resaltaron algunas de las especies que desaparecieron en los últimos siglos. Entre ellas está la Santalum fernandezianum, mejor conocida como Sándalo de Juan Fernández. Esta era una especie chilena que empezó a ser explotada masivamente por sus propiedades aromáticas. La última vez que fue vista fue en 1908 en la Isla Robinson Crusoe.
También se mencionan algunas especies Thismia americana, una especie cuya diminuta flor se asoma desde el suelo y fue vista en Chicago; o la Nesiota elliptica, de la Isla de Santa Helena en el Atlántico sur.
Un caso particular fue la también chilena Tecophilaea cyanocrocus o azulillo. Es natural de las zonas aledañas a Santiago, pero se creyó desaparecida desde 1950. Durante décadas nadie tuvo noticia de esta especie hasta que fue vista nuevamente en 2001. Desde entonces se ha tratado de recuperar su número.
Source: Fayerwayer