«Ha sido una investigación seria, rigurosa y creíble, resultado de más de 114 horas de trabajo y audiencia de 81 expertos con reuniones maratonianas en 48 sesiones en las que se han analizado ingentes volúmenes de información», ha defendido Ana Oramas, diputada de Coalicición Canaria y presidenta de la comisión. Oramas defendió que en la crisis no ha habido «ni un solo ganador» y, aunque ha reconocido que los ciudadanos son los máximos perdedeores, ha querido destacar también menoscabado sufrido en el prestigio de instituciones como el Banco de España o la CNMV, incuso de las entidades financieras, que sufren ahora una grave crisis de reputación. y la crisis dejó además de manifiesto «la debilidad» de la arquitectura institucional con la que se dotó la Unión Europea (UE). Para solucionar esta situación, ha defendido Oramas, hace falta una acción a nivel europeo: «Es evidente que la Unión Europea debe completar y perfeccionar su estructura financiera si quiere evitar una reproducción de los problemas».
Por su parte, Unidos Podemos ha avanzado que quiere llevar a la Fiscalía el dictamen para que la investigación parlamentaria pase a la Fiscalía y se pueda «esclarecer» lo ocurrido por si observa «indicios de delito» en la gestión de los problemas, ha asegurado Alberto Garzón.
Consejo de los letrados
Por otra parte, el dictamen no ha tenido en cuenta los conejos que llegaron de los letrados del Congreso, que recomendaron modificar la redacción para evitar que sea impugnado judicialmente, puesto que atribuye al Banco de España una «grave irregularidad» en las cuentas de 2010 de las cajas que creo Bankia. Supuestamente se produjo porque la institución permitió a estas entidades contabilizar un deterioro de 7.619 millones contra reservas -como se hizo en todas las fusiones frías- y no contra la cuenta de resultados. El texto de los letrados de la Cámara Baja también habla de la «inacción» tanto del Banco de España como de la CNMV en la comercialización de las preferentes.
Durante su intervención en el Pleno de la Cámara Baja donde se aprobado el dictamen final, Garzón consideró que «sí ha habido responsables» en la crisis, apuntando de forma directa a entidades financieras, reguladores, los gobiernos del PP y PSOE por su gestión de los problemas y «los grandes bancos y cajas de ahorros», así como sus gestores.
Source: ABC