Este organismo respalda la prohibición de la Comisión Europea de la adquisición de Alstom por parte de Siemens, ya que la operación habría supuesto la unión de los dos mayores proveedores de material rodante de muy alta velocidad y sistemas de señalización en Europa, con una posición de líder indiscutible en dichos mercados, reduciendo significativamente la competencia en dicha área, perjudicando de esta manera a clientes y consumidores finales mediante el incremento del coste de la construcción de nuevos tramos y líneas de alta velocidad, así como un eventual incremento en el precio por utilizar dichas líneas de transporte.
La CNMC subraya que en nuestro país, que cuenta con la mayor red ferroviaria de alta velocidad de toda la Unión Europea y la segunda a nivel mundial con alrededor de 3.200 kilómetros construidos, Siemens, en consorcio con la empresa también francesa Thales, ha sido uno de los principales proveedores de los sistemas de señalización en las líneas de alta velocidad construidas por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).
Dicha posición de relevancia de Siemens y Thales en los sistemas de señalización de la red ferroviaria de alta velocidad española «se ha visto alterada con la interrupción de nuevos operadores liderados por Alstom, que han sido responsables de la instalación de los sistemas de señalización en las nuevas líneas de alta velocidad en construcción como la línea Valladolid–León–Burgos y/o Madrid- Extremadura», apunta la CNMC.
Source: ABC