Este hito es una consecuencia lógica de la progresiva sustitución que las «telecos» han ido haciendo de sus líneas de ADSL por fibra, además de pontenciar la contratación de esta última, que suele llevar aparejados servicios de más valor como la televisión de pago y por tanto más rentables. La preferencia de los usuarios por los paquetes de servicios más completos, con fibra y televisión, también ha contribuido a esta tendencia.
Prueba de ello es que en los últimos doce meses, mientras las líneas de fibras contratadas crecieron en 1,6 millones de accesos, el ADSL perdió 1,2 millones de líneas. Más de la mitad de las líneas de fibra óptica, en concreto el 56,1%, corresponden a Movistar. En todo caso, los tres grandes operadores de telecomunicaciones del país —Movistar, Vodafone y Orange— perdieron líneas de banda ancha fija en julio y en términos netos, y solo Masmóvil, el llamado cuarto operador, aumentó su base de clientes en 22.800 altas netas.
Lo que tampoco deja de crecer es el parque de teléfono móvil con banda ancha (3G y 4G), que en el séptimo mes del ejercicio sumó 520.147 nuevas líneas, hasta los 41,4 millones de clientes, un 6,7% más que un año antes.
Source: ABC