La historia del mutualismo en España es en buena parte la de agricultores, pequeños empresarios, ferroviarios, médicos, abogados y otros profesionales que se fueron agrupando para asegurar su patrimonio y su propia vida. También las amas de casa. Un grupo de empleadas del hogar fundaron en 1957 en Valencia, con el apoyo del sacerdote capuchino Salvador de Rafelbunyol, un montepío de previsión social para dar protección a aquellas mujeres del servicio doméstico que carecían de acceso al sistema público de seguridad social. Hoy, 60 años después, Divina Pastora está presente en toda España, cuenta con 460.000 asegurados, casi 800 empleados, más de 1.600 millones de euros en activos y factura 235 millones al año.
Los empleados del hogar siguen representando una parte importante de la base de mutualistas y asegurados de la compañía, en torno a 50.000. «Hoy no es nuestro único cliente, pero sí ha marcado la línea editorial de lo que es la entidad», explica a ABC el presidente de Divina Pastora,
Armando Nieto. Esos orígenes se nota por ejemplo en el tipo de producto que comercializa.
Casi la mitad del negocio de Divina Pastora son las pólizas de salud, pero también vende seguros de accidentes y enfermedad, vida, decesos, hogar y defensa jurídica. Ahora bien, se trata de coberturas que cubren al asegurado los siniestros realmente graves, sin complementos que para el perfil de cliente de esta mutua pueden resultar más una comodidad que una necesidad .
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4 de mayo de 2017«No trabajamos con clientes cuyos riesgos ya los quisieran muchas personas. Hacemos seguros que cubren el riesgo que realmente mata o deja lesionado económicamente, no por ejemplo por si se rompe la televisión», explica Nieto. Por ejemplo, en seguros de salud destaca el que incluye atención especializada –traumatólogo, dermatólogo…–, que es lo que realmente demanda el cliente, pues en caso de atención primaria o intervención quirúrgica acaba acudiendo al sistema público.
Precios económicos
Eso, dice Nieto, hace que las pólizas de Divina Pastor «sean mucho más baratas que las de la competencia». «Pero es que además no tenemos una competencia, este nicho de mercado no lo abarca nadie», puntualiza, asegurando que la compañía no tiene además una vocación de competir solo en precio. «Tenemos un precio que garantiza que podemos dar el servicio que prometemos, si los bajamos para ganar cuota de mercado o volumen quizá tenemos que hacer ajustes en la calidad de servicio y en las prestaciones, y eso no es lo que queremos hacer», dice.
Divina Pastora trabaja ya en el lanzamiento futuro de dos nuevos tipos de seguros. Uno, previsto para 2018, es una cobertura para pequeñas pymes domésticas, es decir, para aquellas familias cuya propia empresa o comercio es su patrimonio y forma de vida. Además, la compañía está desarrollando ya este año un producto de hospitalización.
«Nuestra idea en el mercado es seguir creciendo», dice el máximo responsable de Divina Pastor, que confía en alcanzar al cierre de 2017 el medio millón de asegurados. La compañía ha venido creciendo de forma orgánica, pero también a golpe de compras. La mutua ha cerrado en la última década cinco operaciones corporativas: absorbió Alianza Médica en 2007, luego Cisne Aseguradora (2008), Mutualdis (2009), Asmequiva (2011) y L’Aliança, casi una transacción por año entre 2007 y 2012.
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24 de julio de 2017
«Son compañías pequeñas y otras no tan pequeñas que nos han permitido crecer. Llevamos unos años sin hacer ninguna compra porque no hay oportunidades, pero seguiremos comprando cuando el mercado vuelva a moverse», avanza Nieto, quien asegura que esas compras son viables por sus ratios de solvencia y su prudente política. Además, la compañía, que ya opera en el ramo sanitario en Argentina en alianza con una mutualidad local, sondea ya Perú y Chile.
Divina Pastora ha dado beneficios año a año de forma ininterrumpida desde su fundación en 1957. «Y la planificación que hemos hecho para los próximos 20 o 30 años es que vamos a seguir cumpliendo con esa máxima», garantiza Nieto. «Lo tenemos planificado por ese compromiso de prudencia, porque con el pan de la gente no jugamos», explica, recordando que el grupo no ha hecho inversiones especulativas.
Source: ABC