Esta nueva mejora de la calificación crediticia del Reino pone de manifiesto la confianza de los mercados en los fundamentales macroeconómicos del país por encima de la incertidumbre política generada en Cataluña.
Lo cierto es que el cambio de la economía española ha sido incuestionable. Y, concretamente, el año pasado cerró con cifras especialmente positivas: en 2017 nuestro país encadenó tres años consecutivos de crecimiento superior al 3%, creó cerca de medio millón de empleos netos y situó la tasa de paro promedio anual en poco más del 17% (desde el 19,6 registrado en 2016). Además, fue al año en que el PIB recuperó su nivel previo a la crisis y, quizá lo más apreciado por los economistas, con una composición que ha cambiado significativamente en comparación a la de 2008. Según explica Afi en un informe reciente, «esto es el resultado de la importante transformación estructural que ha tenido lugar en la economía española en los últimos años».
Source: ABC