En el conjunto de los Veintiocho, la recaudación proporcionada por el IVA se ha mantenido estable en los últimos años. Para 2016, el promedio se situó en un 7% sobre el PIB, según los datos de Eurostat, mientras que para la zona euro alcanzó el 6,8%. No obstante, el porcentaje de recaudación por IVA varía notablemente en los países de la UE, con cifras por encima del 10% e inferiores al 5%.
En concreto, el mayor volumen de ingresos tributarios por este concepto corresponde a Croacia (13%) y Dinamarca (9,6%). Les siguen Estonia, Finlandia, Suecia y Bulgaria con cifras en torno al 9%, al tiempo que Portugal, Chipre, Eslovenia y Rumanía superan el 8%.
De su lado, Austria alcanza un 7,7% y Alemania un 7%, la misma cifra que la media de la UE-28, mientras que por debajo del promedio se sitúan diez países: Bélgica (6,8%), Irlanda (4,7%), España (6,4%), Francia (6,9%), Italia (6,1%), Luxemburgo (6,5%), Países Bajos (6,9%), Rumanía (6,5%), Eslovaquia (6,7%) y Reino Unido (6,8%).
La presión fiscal en España, el conjunto de los impuestos y contribuciones sociales en relación con el PIB, se situó en 2016 en el 34,1%, cuatro décimas menos que un año antes, y sensiblemente por debajo de la media del 41,3% de la zona euro y del 40% de la UE.
De este modo, España aparece como el noveno país de la Eurozona con menor presión fiscal, por detrás de Bulgaria, Irlanda, Chipre, Letonia, Lituania, Malta, Eslovaquia y Rumanía. Por contra, los países de la UE con mayor presión fiscal en 2016 fueron Bélgica, Dinamarca, Francia, Austria y Suiza.
Source: ABC