No subestimes una crisis de alergia por polen

Si en las últimas semanas has notado sintomatología nasal como congestión, secreción, salvas de estornudos, picor nasal u ocular, lagrimeo y enrojecimiento, o síntomas de asma bronquial, como opresión torácica, dificultad respiratoria, ‘pitos’ en el pecho o accesos de tos frecuente, puede que la culpa sea de la polinización.

La alergia al polen se manifiesta con mayor frecuencia en invierno, sobre todo en los meses de enero y febrero con la floración de las cupresáceas, planta de la familia de las coníferas, como los cipreses, abundantes en los jardines de la sierra madrileña. Pero ya estamos en marzo y con la primavera llegan las alergias a los pólenes del plátano de sombra, olivo y gramíneas.

La polinosis afecta al 15% de la población general y a un 30% de los jóvenes, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social¹, siendo uno de los motivos más frecuente de consulta en época primaveral en las Urgencias del hospital HLA Universitario Moncloa. Entre sus afectados, no solo se cuentan pacientes con diagnóstico previo de alergia al polen, sino que también puede revelarse ‘de novo’ en personas que se han sensibilizado por primera vez y sin importar su edad.

Una consulta muy frecuente en el servicio son las relacionadas con los síntomas nasooculares (rinitis y conjuntivitis) que, cuando son severos, pueden interferir de manera importante en la calidad de vida de los pacientes durante esta estación. Pero con diferencia, la crisis asmática es la manifestación más grave de este cuadro clínico, ya que, en casos extremos, puede incluso causar la muerte. Algo cada vez menos frecuente gracias a la educación sanitaria de los pacientes asmáticos y al uso de tratamientos de mantenimiento que ayudan a evitar episodios de crisis graves.

Ante una crisis asmática moderada o severa, el afectado debe acudir a Urgencias para evitar que el cuadro evolucione a muy severo, con grave insuficiencia respiratoria y riesgo de un desenlace fatídico.

Sin embargo, muchas personas no buscan ayuda profesional y abusan de la llamada medicación de rescate, como el Salbutamol (conocido como Ventolin). Este tipo de fármaco produce una respuesta de broncodilatación que alivia al paciente de forma inmediata, pero carece de acción antiinflamatoria sobre el árbol bronquial, que es la base del tratamiento de mantenimiento y preventivo de crisis asmáticas, pudiendo incluso provocar efectos secundarios que empeoran el estado del paciente asmático. Además, los cuadros respiratorios infecciosos (gripe, bronquitis) inciden de forma más grave en estos pacientes, y pueden desencadenar con más facilidad crisis asmáticas graves.

Por el contrario, el paciente que acude a las Urgencias de HLA Universitario Moncloa, recibe atención inmediata, con una exploración física y unas sencillas pruebas diagnósticas como la medición de la saturación de O2, la determinación del flujo espiratorio máximo (FEM) y, en algunas ocasiones, una radiografía de tórax y gasometría arterial mediante punción del brazo. Con toda esta información, los médicos del servicio pueden determinar la gravedad de las crisis clasificándolas en leves, que reciben el alta en una hora tras la administración aerosoles; moderadas, las cuales requieren otra medicación y la estancia en urgencias se puede prolongar hasta 3 o 4 horas; y severas, que generalmente requieren ingreso hospitalario, bien en hospitalización convencional o en UCI.

Cuando el paciente es dado de alta, generalmente debe seguir un tratamiento con corticoides orales, asociaciones de broncodilatadores y corticoides inhalados, además de referirle a la consulta con un alergólogo.

A los pacientes con alergia al polen, sobre todo si manifiestan síntomas de asma bronquial, se les puede recomendar iniciar un tratamiento con broncodilatadores y corticoides al inicio del periodo estacional, para mantener a raya la inflamación bronquial. También se puede recomendar un tratamiento de inmunoterapia (vacunas de la alergia) que son cada vez más eficaces y con menos efectos secundarios, siempre prescritas cuando estén indicadas, por parte del profesional.

En cualquier caso, la recomendación a los alérgicos es seguir una serie de medidas para evitar la exposición al polen, como permanecer el máximo tiempo posible dentro de casa con las puertas y ventanas cerradas y utilizar aire acondicionado con filtros, especialmente en días soleados, secos y ventosos; evitar zonas de abundante vegetación, o montar en motos, bicicletas, descapotables o abrir las ventanillas del coche; preferentemente usar filtros de polen; evitar cortar el césped o estar cerca de él y reducir las actividades al aire libre durante las horas de emisión de polen (de 5 a 10 AM) y en su descenso, al enfriarse la atmósfera (de 7 a 10 PM).

Sobre HLA Grupo Hospitalario

El Grupo Hospitalario HLA está compuesto por 15 hospitales integrados con 35 centros médicos multiespecialidad y una red de unidades de referencia en tratamientos de última generación. 42 clínicas dentales, 11 unidades de reproducción asistida, 30 clínicas oftalmológicas dotadas de la más avanzada tecnología y 436 centros de análisis clínicos completan la estructura que HLA pone a disposición de sus pacientes. Con 1300 plazas de hospitalización HLA es un referente en la atención hospitalaria y ambulante. Más de 36 años de experiencia y presencia en seis países configuran un modelo de atención que basa su filosofía en el trato humano, la excelencia, el liderazgo, la responsabilidad y la especialización.

Source: A tu salud

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