Algunos alimentos están clasificados como «enemigos de las dietas». Por ejemplo, los productos libres de gluten están de moda y las recetas de postres sin azúcar son algunas de las favoritas de los reposteros light. Pareciera que las harinas y los dulces son, de repente, comidas malas, pero ¿hasta que punto son perjudiciales para la salud?
Está comprobado que los productos libres de gluten no aportan muchos beneficios para la salud (ni para la silueta) y que, incluso, pueden traer problemas porque las personas necesitan carbohidratos complejos para cuidar la salud cardíaca. Por otro lado, el azúcar, que ha sido acusada de causar obesidad y diabetes tipo II, entre otras enfermedades, ¿es realmente tan mala si la comemos en moderación?
Lo mejor es una dieta variada
Lo mejor para nuestra salud es una dieta llena de frutas y verduras, pero la variedad también es buena para nosotros y, en especial, para la salud mental. Eliminar ciertos productos de la dieta, sobre todo el azúcar, que está tan presente en muchos de los alimentos que consumimos, puede llevar a que las personas tengan pensamientos obsesivos y desarrollen una relación poco sana con la comida, todo lo que puede resultar en un desorden alimenticio.
Según una entrevista del Huffington Post con Caitlin Croteau, nutricionista y creadora del blog Finding body Freedom, «evitar el azúcar significa alienar alimentos específicos. Cuando nos decimos que no comamos algo, eso multiplica los antojos y puede llevar a comer más de la cuenta o a desarrollar una relación poco saludable con la comida. En vez de abandonar el azúcar, recomiendo que las personas trabajen en crear una relación saludable con ella.»
No te sientas mal por comer productos con azúcar, hacerlo en moderación y con consciencia es la clave para no consumir más de la cuenta.
Es combustible para tu cuerpo
Todo es bueno en moderación y optar por una dieta restringida puede hacer que tu cuerpo no reciba las vitaminas y minerales que necesita para estar saludable. El azúcar le da energía a los músculos, el cerebro y el sistema nervioso. El azúcar en la sangre — llamada glucosa — funciona como combustible para las células y también se almacena en el hígado en forma de glucógeno, que sirve como una reserva de energía que se utiliza cuando el nivel de azúcar en la sangre cae, cuando haces ejercicio, por ejemplo.
Sin embargo, esto no significa que puedas comer todas las tortas de chocolate que quieras; para usar el azúcar como energía es mejor que optes por alimentos saludables que también tengan azúcar, como las frutas y las nueces. Esos productos tienen fibra que ayuda contrarrestar los efectos de la fructosa y mantener el nivel de azúcar en la sangre estable durante más tiempo. Los alimentos con azúcar agregada, como las gaseosas y las golosinas, también te pueden dar energía, pero carecen de nutrientes.
Las dietas no incluyen solo a la comida
La vida social también se puede ver afectada cuando alguien sigue una dieta muy restrictiva, aunque eso sucede sobre todo cuando alguien tiene una relación poco saludable con los alimentos. Dejar de salir con amigos porque comen «alimentos no permitidos» puede obstaculizar nuestras relaciones.
¿La conclusión? Puedes comer azúcar, solo debes saber elegir
El azúcar puede beneficiar nuestra salud y darnos energía para empezar los días de la mejor forma posible. Solo debemos saber diferenciar qué alimentos azucarados nos convienen. Una fruta o un vaso de yogur pueden ser la fuente de dulce que necesitas y también le darán a tu cuerpo otros nutrientes valiosos, como vitamina C y calcio. Sin embargo, una bolsa de golosinas llenará tu cuerpo de azúcar y no mucho más.
La clave es desarrollar una relación saludable con los alimentos que te llevas al cuerpo, priorizar los que lo nutren, dejar las indulgencias dulces (como una torta de chocolate) para algunas ocasiones especiales y olvidarte de los «placeres culpables». No te castigues por comer esa torta, solo hazlo en moderación y estarás bien.
Fuente: vix / MF
Source: Informe21