Mi vecino de arriba tiene dos perros que ladran continuamente, a veces incluso durante la noche. ¿Se puede tomar alguna medida para evitar estas molestias?
(Consulta de José Peláez)
Responde Ferran Font, director del Gabinete de Estudios de Pisos.com
El derecho a tener una mascota debe ser compatible con el derecho al descanso de nuestros vecinos, siendo este uno de los motivos de desencuentro más habituales. Los ladridos representan un prejuicio, por lo que son denunciables. Si nos encontramos ante algo así, la vía diplomática siempre es la primera opción, ya sea de forma personal o en grupo con otros vecinos afectados. En la mayoría de los casos, el dueño busca una solución al problema, ya que muchas veces no es consiente del daño que su perro nos está ocasionando.
Si el diálogo falla, hay que poner en conocimiento de la situación al presidente de la comunidad, que también tratará de buscar el acuerdo desde el diálogo. Si por la vía amistosa no se resuelve, habrá que iniciar la vía administrativa, denunciando ante el ayuntamiento y la policía local, que deberá hacer mediciones de los niveles de ruido y aplicar las sanciones correspondientes. También existe una vía civil que parte de la Junta de Propietarios, que iniciaría una acción judicial de cesación. En los casos más graves, también podría acudirse a la vía penal.
Source: ABC