Hacienda señala que la renta mínima quebraría el Estado y traería una «destrucción masiva de empleo»

La renta mínima que pide el Congreso de los Diputados supondría la «quiebra de la Hacienda Pública», una «destrucción masiva de empleo» y para pagarla habría que subir el tipo general del IVA al 27%. Así lo registran los cálculos de Hacienda que, a través del secretario de Estado de Presupuestos, Alberto Nadal, ha dibujado un escenario apocalíptico en el Congreso de los Diputados al calcular el impacto que tendría implantar esta medida.

El Congreso de los Diputados aprobó hace meses una proposición de Ley al Ejecutivo para implantar una renta mínima de 426 euros a unos 2,2 millones de beneficiarios potenciales sin empleo. Fedea o la Airef habían cifrado en unos 16.000 millones de euros el coste de esta medida. Nadal ha criticado que en la propuesta del Congreso, la prestación no requiere requisito alguno de residencia u origen, lo que, en su opinión, provocaría un efecto llamada de ciudadanos desde otros países de la UE que no cuentan con sistemas de protección tan generosos. Y ha lamentado que tampoco se exija estar apuntado en programas de búsqueda de empleo o reinserción social.

«Todos los cálculos realizados se han hecho a población constante, sin tener en cuenta el efecto llamada y sin incluir las enmiendas planteadas por algunos grupos que rebajan la edad para recibir la prestación de 18 a 16 años y no piden requisito de residencia», ha recordado Nadal, para cifrar en entre un 1,5 y 2 puntos del PIB el coste de la medida, es decir, hasta 23.340 millones de euros. En opinión de Nadal, si se incluye el efecto llamada, las estimaciones de Airef o Fedea «se duplicarían o triplicarían», es decir, sobrepasarían los 45.000 millones de euros

¿Cómo se pagaría esto? En palabras de Nadal, subiendo seis puntos el tipo general del IVA al 27%, o en tres puntos los tres tipos del impuesto, que pasarían al 7% el superreducido, al 14% el reducido y al 24% el general. Otra alternativa que ha destacado seria incrementar un 20% el tipo medio de IRPF de los contribuyentes. En definitiva, un hachazo fiscal que supondría, en sus palabras, que «todo el sistema de bienestar estaría en peligro y crearía las condiciones para que millones de españoles estuvieran en riesgo de exclusión».

«Llevar al BOE la proposición de ley tal y como está redactada e incluyendo las enmiendas planteadas, supondría la quiebra de la Hacienda pública y devolvería a la economía a los peores años de la crisis del euro», ha remachado.

Desincentivo laboral
Nadal también ha resaltado el «desincentivo» que crearía de cara al mercado laboral. Al sumar prestaciones no contributivas, complementos a mínimos y ayudas sociales, Nadal describió que las administraciones dedican 22.000 millones, casi un 2% del PIB un porcentaje similar al de los países de nuestro entorno. En la actualidad, las comunidades autónomas cuentan con una red de rentas mínimas que suman 1.400 millones para 320.000 beneficiarios que cumplen una serie de requisitos.

Nadal ha llamado a aclarar las fronteras entre las prestaciones financiadas por las autonomías y las que despliega el Estado a través de la Seguridad Social. Si bien ha lamentado la elevada desigualdad de España, ha considerado que el desempleo es la razón de este aumento de las inequidades de renta. «Cuando me comparan con los países nórdicos, que más quisiera yo contar con sus márgenes presupuestarios» ha sostenido.
Source: ABC

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